TEMA 10. El nacimiento de los primeros centros de docencia teológica —Esquema
a) La escuela de Alejandría y sus características —Precedentes Desde su fundación en 331 a.C. por Alejandro Magno, en la ciudad de Alejandría se desarrolló una intensa vida intelectual. La mezcla de culturas (oriental, egipcia y griega) produjo el helenismo. En ese ambiente, la comunidad hebrea, que era muy importante —la tercera parte de sus habitantes (estaba instalada en dos de los cinco barrios de la ciudad)— y recibió también una seria influencia de la filosofía griega. Entre los siglos III y II a.C. se escribió la versión griega del Antiguo Testamento de los "70". Filón (25 a.C a 41 d.C) utiliza ampliamente los escritos de los filósofos griegos, especialmente los de Platón y los estoicos, así como los escritos del Antiguo Testamento. A finales del siglo II se puede decir que existían tres posturas fundamentales respecto a las relaciones entre fe y razón, representadas por:
En este clima surge la Escuela de Alejandría. Durante el siglo III hay relativa paz para el cristianismo que se desarrolla grandemente. —Características de la Escuela de Alejandria Es la Escuela catequética más importante de la antigüedad cristiana. Constituye los primeros intentos de fundar una ciencia teológica utilizando la filosofía neoplatónica. De ahí se derivan sus principales características:
Esta última es la característica más notable. Los griegos (estoicos principalmente) la utilizaban para interpretar las mitologías de Homero y Hesiodo. El primer judío que la utilizó fue Aristóbulo en el siglo II a.C. Filón la usa mucho. El fundamento de la teología es la Sagrada Escritura: una exégesis correcta de la misma y el empleo de la filología (método alegórico utilizado ya por los filósofos griegos en sus "mitos"). —Origen. Panteno Es el fundador de la Escuela. Siciliano de origen, y estoico al principio, hizo un viaje a la India. Se establece en Alejandría en el año 180 y muere hacia el 200. Algunos opinan que es el autor de la "Epístola a Diogneto". —Representantes de la escuela de Alejandría
—Exégesis
—Filosofía: neoplatonismo (participación de las Ideas arquetípicas; exitus (salida de Dios) y reditus (vuelta a Dios de todo); como consecuencia: misticismo (vida ascética e intensa contemplación). —Teología: defensa de la divinidad del Verbo (consubstancialidad)
—Bibliografía: Quasten I, 351-411. b) Otras escuelas y centros teológicos: Cesarea, Antioquía —Escuela de Cesarea Es una filial de la de Alejandría, fundada por Orígenes en el año 230. Tiene influencia en Palestina y en Capadocia. —Representantes
—Escuela de Antioquía —Períodos
—Características
—Bibliografía: Quasten I, 351-411. c) Diferencias principales entre la exégesis y la teología alejandrinas y antioquenas "Al interpretar la Sagrada Escritura, los antioquenos prestaban especial atención al sentido literal, histórico (sin reducirse a él). Los alejandrinos, en cambio, cultivaban con intensidad el sentido alegórico, moral y anagógico de la Escritura; trataban de descubrir en los textos bíblicos un sentido oculto, más profundo. Ese objetivo casaba bien con su valoración del cristianismo como «gnosis verdadera» que no necesita misteriosos libros esotéricos, sino que descubre los misterios en los textos trasmitidos y reconocidos por la Iglesia. En la dogmática, los antioquenos tendían a subrayar más las diferencias en Dios y en Cristo («teología de la separación»), mientras que los alejandrinos acentuaban más la unidad de las tres personas en Dios y de las dos naturalezas en Cristo («cristología de la unidad»). Por supuesto que esta tipificación tosca de las escuelas sirve tan sólo como punto de apoyo para la orientación básica y no debe caer en el esquematismo: en concreto, hay que examinar y valorar cuidadosamente en sí misma cada aseveración de las «escuelas»" (Drobner, 146-147). d) Visión general del nacimiento, desarrollo y fin de estos centros En los apartados anteriores hemos desarrollado el tema de este último apartado del capítulo. Sin embargo, para completar esta visión, vale la pena copiar unas observaciones de Drobner (pp. 145-147), catedrático de Patrología e Historia de la Iglesia en la Facultad de Teología Católica de Paderborn, sobre los sistemas de enseñanza en las escuelas de la antigüedad. "Cuando se habla de escuelas en la antigüedad —tanto en el ámbito cristiano como no cristiano— hay que distinguir en primer lugar, admitiendo la posibilidad de ulteriores matizaciones, entre escuela como centro docente y escuela en el sentido figurado de una determinada doctrina común". "El sistema de enseñanza helenístico-romano constaba de tres etapas y comenzaba en el sexto o séptimo año de edad con la enseñanza elemental de la lectura, escritura y cuentas impartida p or un maestro en casa o en la escuela elemental del litterator/ludi magister (grammateV ). Venían luego las clases con el grammaticus, que enseñaba la gramática, la primera de las siete «artes liberales», es decir, los fundamentos de la lengua. Para ello se servía de las principales obras literarias de la Antigüedad; sobre todo de Homero y de Virgilio. El rethor continueba la formación en las seis materias restantes: dialéctica, retórica, aritmética, música, geometría y astronomía. Hasta entonces los fundamentos escolares eran comunes para todos los ilustrados de la Antigüedad. Aunque algunos Padres de la Iglesia (por ejemplo, Tertuliano) lamentaban que los hijos de cristianos aprendieran en esas escuelas los inútiles, incluso dañinos, mitos paganos, sin embargo, jamás existieron en la Antigüedad escuelas cristianas que impartieran la enseñanza general. La formación literaria uniforme constituía la base de todas las profesiones cultas. Todas ellas presuponían un sobresaliente dominio de la lengua: la del rethor (maestro), la del abogado y la del político. Por último, estaba la etapa superior: la «escuela superior» del pensamiento y de la comprensión del mundo, la filosofía, donde el término «escuela» tenía dos significados. Se podía asistir a las clases de un filósofo (la escuela de filosofía más famosa e importante fe desde el año 387 a.C. hasta el año 529 d.C. —y, sin duda, la escuela de más larga vida de la historia— la Academia Platónica de Atenas, en la que estudiaron también destacados Padres de la Iglesia como Basilio el Grande y Gregorio de Nacianzo), pero uno también podía adherirse a una doctrina filosófica («escuela»)". | ||